Existen seres humanos cuya pasión por su actividad deja huella y un legado interminable que se renueva al paso de los años y así es el legado de la Escuela de Danza Gloria Campobello fundado en 1963 por Margarita Robles Regalado.
Con cada nueva generación que desde aquella fecha de principios de los sesentas se inmortaliza la pasión y el legado de quién abrió las puertas de la profesionalización de la danza en nuestra región y su legado continúa gracias a su ejemplo.
Esa belleza ahora se actualiza gracias a quienes recibieron ese ejemplo de tenacidad y deseo de excelencia en las aulas de la escuela Gloria Campobello pero también gracias a sus hijas la Dra. Minerva Tapia y Lilian Tapia quienes recibieron ese ejemplo de su madre Margarita Robles y ahora hacen eco de esa belleza y visión.
Nada detiene el desarrollo de la belleza del arte. A casi un año y medio después de una pandemia que a la fecha no se ha ido del todo el escenario del Centro Cultural Tijuana el sábado 29 de mayo volvió a abrir su escenario para dar paso a una muestra del legado que iniciara Margarita Robles Regalado con la escuela de Danza Gloria Campobello.
Con todas las medidas y protocolos de seguridad al máximo el escenario se iluminó con la «Gala de Danza Margarita Robles» Co- Producida por el Cecut con un programa que anunció su tercera llamada a las 19:15 horas con el video «Semblanza Margarita Robles» en donde se narra la vocación de una niña que desde la cuna ya daba muestra de su talento cuando se movía al ritmo de los acordes que tocaba el abuelo con su guitarra.
Y por fin el telón se abría y la belleza de la música y la tensión de los ensayos y la emoción de los papás, los hermanos, los amigos y los amantes de la danza volvían descubrir el colorido de los vestuarios, la elegancia del porte, la excelencia de los movimientos cincelados en horas de repetir y lograr el encuentro con el público y así comunicar arte y pasión.
Lilian Tapia lo dijo muy claro cuando emocionada antes de entrar al recinto comentó: «Ya necesitábamos este momento: El escenario abierto y la bendición del arte, no vamos a dejar que nadie no lo quite. Nos defendemos de todo a través del arte y ya estábamos sedientos de éste momento». Comentó la también coreógrafa y maestra.
Y la belleza deslumbró el escenario. La escuela Gloria Campobello con Cygnus dió muestra de danza contemporánea bajo la dirección de Jacqueline Rodríguez.
Continuó Subterráneo Danza Contemporánea con «Amapola» dirigida por Gregorio Coral Pulido y le siguió Lux Boreal Danza Contemporánea con Desierto Industrial bajo la dirección de Ángel Arámbula.
Continuó con Grupo de Danza Minerva Tapia con «Padres» segmento de la obra Juan Soldado: Saint Of The Migrants con coreografía a cargo de Minerva Tapia. El programa continuó con «Variaciones» dirigida por Javier Marrón.
Danza Española con «Farruca Jerezada» con coreografía de Margarita Robles y adaptación de Lilian Tapia y «Fragmentos del Quijote» coreografía de Alexander Gorsky y Marius Petipa y finaliza con un soberbio número Grand Pas De Deux Acto IV interpretado por Luz Marina Hidalgo Alejo con Kitri y Javier Marrón como Basilio.
Un castillo apareció en el escenario y fue el fondo perfecto para la parte clásica del programa y las bailarinas se comunicaban con sus papás desde detrás de bambalinas. Las niñas, peinadas y listas para participar emocionadas enviaban imágenes en directo del momento previo antes de pisar el escenario.
Y la familia y amigos, desde su asiento ya estaban emocionados de ver a sus hijas crecer en el escenario transfigurados por la belleza de la creatividad y el arte parecían otras en el escenario del Cecut.
Otros vivieron la magia a través del enlace en vivo por internet y esa alegría que gracias a una pionera de la danza es posible y ese arte tan necesario y tan importante como lo son todas la profesiones por que es una necesidad soñar para seguir viviendo y ese honor y ese legado de la danza gracias a quien honor merece: Margarita Robles Regalado de la Escuela de Danza Gloria Campobello.
Al final todos los bailarines sobre el escenario y la Dra. Minerva Tapia y Lilian Tapia tomados de la mano agradecieron el momento y una foto de Margarita Robles Regalado en el fondo del escenario.
Y la vocación de una niña que desde la cuna ya bailaba a ese ritmo de la guitarra ahora es un eco de belleza a las nuevas generaciones de nuestra ciudad que con disciplina y talento actualizan la belleza del arte en movimiento.
Texto y Fotografía: Luis Felipe Cota Fregozo.